"Porque el fin no justifica a los
Medios."

sábado, 29 de octubre de 2011

Ignorar a la Iglesia - Ocultar lo que a todos interesa

Siguiendo los pasos de su beato antecesor, el Papa Benedicto XVI ha realizado en Asís la “Jornada de Reflexión, Dialogo y Oración por la Paz y la Justicia en el Mundo”. A ella asistieron nada menos que 300 líderes de todas las religiones del mundo (176 no cristianos). Además, como novedad, asistieron también personas no creyentes. Estaban representadas 50 naciones, es decir que fue un evento mundial y en el que participaron creyentes y no creyentes. Todos unidos a favor de la paz y la justicia, que tanta falta hacen en todo el mundo. Es difícil pensar que un medio de comunicación serio no haya cubierto una noticia de semejante valor.

Sin embargo así sucedió. El diario “El País” de España no dedicó a éste evento ni siquiera una línea. Lo pueden confirmar, ni el 27 ni el 28 del presente. Aunque digan que toda comparación es odiosa, sólo para dejar en claro que era una noticia relevante para España, el “ABC” en las mismas fechas publicó no sólo una, sino tres noticias: una el 27 y dos el 28, sin contar con una que anunciaba el evento el 18 de octubre.

Todos podemos comprender que la línea editorial de “El País” no sea afín a la Iglesia Católica pero los lectores tenían derecho a conocer una noticia de tal magnitud. No estamos hablando de una canonización o de la presentación de una encíclica (actos importante pero de carácter estrictamente eclesial). Se trata de un evento que unió a prácticamente todas las religiones del mundo y al que respondieron incluso los no creyentes. No es posible aceptar que quien informa se sienta con el derecho de ocultar aquello que le molesta o que simplemente no comparte. 

Porque el fin no justifica a los Medios.

P. César Piechestein

miércoles, 26 de octubre de 2011

Objetividad e imparcialidad en la información - Un pleito en la blogosfera.

Desde hace casi un año que iniciò en el vicariato apostólico de Sucumbìos, amazonía norte del Ecuador, un problema de carácter eclesial que por sus connotaciones sociales ha llegado a ser tambièn polìtico. Su origen fue el cambio de administraciòn, que pasò de la congregaciòn de los padres Carmelitas Descalzos (provincia española) a manos de los Heraldos del Evangelio. Esto suscitò un conflicto que terminò dividiendo a la comunidad cristiana de esa jurisdicciòn eclesiàstica.

Una vez que pasaron los momentos màs tensos del conflicto, que fueron cubiertos por la prensa nacional, es difícil poder encontrar informaciòn clara y objetiva de lo que sucede en esa zona. Como medios existen dos blogs que uno puede consultar, pero lamentablemente ninguno de los dos brinda un servicio imparcial. Y es que cada uno de ellos responde a uno de las partes dentro del conflicto. El blog de Isamis (Iglesia de San Miguel de Sucumbìos) comunica los hechos, pero desde su perspectiva, mientras “Sucumbìos Informaciòn” cuenta la misma historia desde una visiòn completamente opuesta a la anterior. Queda como tarea al lector el descifrar la noticia y descubrir lo que se comunica “entre lìneas”.

Es cierto que uno no puede pretender una informaciòn oficial en un blog, pero es tambièn cierto que, a falta de otros medios de comunicaciòn, éstos se convierten en el ùnico recurso. En casos como el citado, uno siente la necesidad de que quien realiza un servicio de comunicaciòn procure mantener un comportamiento ètico. Cuando se trata de reportar hechos y màs aùn existiendo un conflicto grave de por medio, es de esperarse que quien lo da a conocer procure dejar de lado, en la medida de lo posible, pasiones y opiniones personales. Los lectores tenemos derecho a una informaciòn clara y lo màs objetiva posible.

Porque el fin no justifica a los Medios.

P. Cèsar Piechestein

viernes, 21 de octubre de 2011

Muerte de Muamar Gadafi: ¿era necesario publicar las fotos del cadáver?

Una vez más los medios de comunicación se tiñen de sangre. Sobre la muerte de Gadafi son muchas las fotos que circulan por internet, sin contar con las imágenes transmitidas por televisión y los videos en youtube, se podría hacer hasta una fotonovela con aquellas que muestran al ex-dictador aún vivo, herido y ,según información versada, pidiendo clemencia. Todo para confirmar su deceso, sea por un ataque al lugar donde se refugiaba o por ejecución, al final no se entiende el por qué de mostrar su cuerpo como si fuese un trofeo.

Las preguntas siguen siendo las mismas: ¿es necesario a nivel comunicacional mostrar imagenes morbosas? ¿realmente son una exigencia del lector? ¿tienen los editores conciencia de las consecuencias sociales de este tipo de publicaciones?

A la primera pregunta responderemos que no es necesario mostrar imagenes como las del cadáver de Gadafi para cumplir con el deber de informar. Es lamentable que diarios serios como el ABC en España, el Corriere della Sera en Italia o El Universo en Ecuador, no hayan podido evitar caer en la tentación. Sin embargo podemos poner como ejemplo al diario Avvenire de Italia que informó y opinó al respecto en varios artículos sin mostrar en ninguna ocasión las fotos de las que estamos hablando. En su primera página pueden observar como viene presentada la noticia.  
Creo que hablo en nombre de muchos al responder a la segunda pregunta. Ningún lector, en sano juicio, exige que se le muestren éste tipo de imagenes. Creo que a la mayoría de los ciudadanos nos basta con la confirmación oficial del evento por parte de la autoridad competente. Bastaba con publicar la misma y la foto del portavoz para que creyésemos a pie juntillas en la muerte del ex-dictador.

Pienso que la tercera pregunta la deberían de responder los mismos editores. Estoy convencido de que saben o por lo menos intuyen las consecuencias de éste tipo de publicaciones.

Varios artículos hablan ahora de una Libia unida, yo me reservo el derecho a la duda. Creo que, a pesar de todo, Gadafi seguía siendo el líder de muchos líbicos y que ésta historia está muy lejos de terminar. La violencia engendra violencia y si además le damos publicidad, seguro que la hacemos aún más fuerte, capaz de llegar hasta donde jamás habría podido sin la ayuda de los medios de comunicación.

Porque el fin no justifica a los Medios.

P. César Piechestein

martes, 18 de octubre de 2011

Indignados y "Black bloc": ¿hacia donde se inclina la balanza informativa?

Es bien sabido que la violencia genera noticia y estaría de más pensar que las cosas cambiarán pronto. Sin embargo sería irresponsable no alzar una voz de protesta ante el último fruto de la desinformación, esta vez en Italia.

El sábado 15 de octubre sigue fresco en la memoria visual de todos los italianos y de muchos extranjeros. Lo que se anunciaba como una manifestación pacífica se transformó, por autoría de un puñado de delincuentes, en una batalla campal. Cientos de noticias surgieron como consecuencia y todos los días nos siguen ofreciendo información al respecto.

Quisiera tomar como ejemplo uno de los diarios más leídos del país, "La Repubblica". Del 15 de octubre hasta hoy han sido publicadas 35 noticias al respecto, de las cuales sólo dos hablan de la auténtica manifestación y del objetivo que perseguía.

Quienes se atreven a dar números hablan de un máximo de 500 violentos, mientras los que realmente marchaban acordes con el objetivo eran miles. Y es que de los verdaderos protagonistas y del sentido de la manifestación poco o nada se dice ni se dirá.

Todavía se conserva también fresco en mi memoria lo vivido en la Jornada Mundial de la Juventud en Madrid. Dos millones de jóvenes, con un sólo objetivo, no fueron lo suficientemente importantes como para mantener la atención de los medios. Bastaron 3000 anarquistas que con gritos, insultos y hasta violencia física irrumpieran en escena, para robarse toda la atención.

Quiero que me entiendan bien. No es que yo piense que no se deba cubrir actos de crónica como los protagonizados por los del "Black bloc" italianos o por los "Anti Papa" españoles. Lo que quiero es insistir en que no por darles espacio a ellos hay que quitarle luz a los demás. Al final seguro que eran más importantes los miles de manifestantes pacíficos, que hicieron mucho mérito como para quedarse sin su lugar en las noticias. ¿O es que no pesaban más los dos millones con el Papa que un puñado de anarquistas?. Lo uno no debería oscurar lo otro. ¿O es que de ahora en adelante la única forma de darse a conocer es a través de la violencia?

Que recuerden los señores periodistas, los editores y directores de noticias que todos los ciudadanos tenemos derecho a la información, y esa tiene que ser completa. Sepan que así como van las cosas no sólo que están violando ese derecho, sino que parcializando así su servicio, se hacen cómplices de los "malos de la película".

Porque el fin no justifica a los Medios.

P. César Piechestein

lunes, 17 de octubre de 2011

¡Bienvenidos!

Globalizados y empapados de cultura digital no podemos conformarnos sólo con una cara de la moneda. Es nuestro deber investigar para poder descubrir todas las facetas de los hechos. No podemos aceptar sin cuestionar, la información que nos llega a cada momento.

El objetivo de este blog es precisamente el de descubrir las medias verdades y procurarles aquello que les falta para completarse. Espero que lo podamos hacer juntos. Sus comentarios y aportes serán siempre bienvenidos.

¡Manos a la obra!